Su dia se acaba con el castillo de Chenonceau.
Este castillo del Renacimiento francés fue eregido en el siglo XVI por Thomas Bohier, administrador de las finanzas de Carlos VIII, Louis XII y Francisco Iero. Sus frequentes cambios de proprietarios podrían ser la fuente de una novela rocambolesca. Las mujeres, esposas legitimas, favoritas, reinas, fueron durante 400 años sus heroinas felices o desgraciadas, lo que le vale ser llamado “Castillo de las Damas”